sábado, 11 de agosto de 2012

Vaya playas


“¡Esto es el paraíso!”. Es lo primero que piensas. Lo que siempre has visto por la tele y revistas, lo tienes delante: esas playas de tierra blanca, agua color turquesa y hileras de palmeras bordeando la costa están ahí. La sensación es de que estas en otro mundo.

La arena, fina, de color claro, que no se pega en los pies. Resulta muy agradable. El agua, cristalina y limpia. Poco profunda y donde te puedes adentrar sin que haya irregularidades en el suelo y sin que te cubra inesperadamente. Nada de manchas de aceite flotando, bolsas y basura a la deriva, todo muy natural y puro. 


Hotel Grand Palladium


Complejo turístico situado a 20 Km. del aeropuerto de Punta Cana. En parcela de 320.000 metros cuadrados. Engloba los hoteles Grand Palladium Punta Cana Resort & Spa, Grand Palladium Bávaro Resort & Spa y el Grand Palladium Palace Resort Spa & Casino. Todos ellos comunicados entre sí, siendo de uso común todos los servicios. Los caminos y zonas comunes están impecables y limpias. Se ve a un gran numero de personas trabajando, para que todo esté perfecto – y lo está -.



Dispone de varios niveles de estancias. Nosotros optamos por la mas económica, pero ya disponía de todo lo necesario. Al ser inicialmente de dos camas, nos pusieron otra supletoria para dormir los 3 separados.



A nivel de comida, dispone de 8 restaurantes temáticos a la carta (cocina internacional, asiática, Tex Mex, italiana, mediterránea, española, brasileña y japonesa), que de los cuales 6 son también buffet libre. Entramos en casi todos los sitios y estaba todo muy bueno. Había un gran surtido donde escoger, personal trabajando para tener un buen servicio y platos/cubiertos limpios en todo momento. Lo de todo incluido es un lujo ya que puedes comer todo lo que quieras sin tener que preocuparte de sacar la VISA.



Las bebidas también estaban incluidas, ya sea en los diferentes bares, recepciones o en las mismas piscinas, en sus famosas “barras húmedas”. Dispone de 4 piscinas. También dispone de un spa, con diferentes piscinas de agua caliente y chorros, así como varios tipos de sauna y de tratamientos. Es una experiencia inigualable terminar los últimos rayos de sol del día en las tumbonas del spa.




Tambien dispone de una zona deportiva, donde se puede practicar casi cualquier deporte. Simplemente has de pedir el material (balon, palo, raqueta, ...) al personal de alli.


Viaje


Al fin llegó el dia. 09 de Mayo del 2012
Primer dia de vacaciones y habia que madrugar un poquito (7:00h), pero el madrugón valía la pena.
Quedamos en la estación, algunos con mas puntualidad que otros. Por eso quedamos con tiempo por si habia cualquier imprevisto. Una vez reunidos los tres integrantes, hacemos un check-list rápido y comprobación de la documentación básica (pasaportes, papeles de la agencia, dinero, ...) y compramos el billete del tren.
Viaje hasta Sants. Tiempo suficiente para vernos “las pintas de guiri con los maletones” y empezar a creernos lo que estamos haciendo. Las risas son inevitables, así como los nervios al estar cada vez mas cerca del destino. Hacemos trasbordo en el bus de Sants hasta el aeropuerto. Gracias a la agilidad de uno de los integrantes para moverse con transporte urbano por Barcelona.


Cada vez queda menos. Al fin llegamos al aeropuerto del Prat. Terminal 1. Buscamos la zona de la compañía aerea para facturar la maleta. Momento para volver a repasar el aspecto de las maletas, flejarlas y apostar por el peso de cada una. Al final, facturamos todo sin problemas y nos despedimos de las maletas hasta Punta Cana.
Buscamos la puerta de embarque y aprovechamos para tomar un desayuno y felicitar al integrante que justo ese dia era su cumpleaños. Que mejor que celebrarlo con un señor viaje.


Llegó el momento de coger el primer avion. Escala Barcelona-Madrid. Era mi segundo viaje en avion – el primero fue a Ibiza el verano pasado -. Me dió menos impresión ya que no era tanta novedad, todo y que me preocupaba un poco coger tantos aviones sin apenas experiencia. El viaje pasó rápido y rápidamente estabamos en la capital.
La primera vez que estaba en Madrid. Al tener 4 horas hasta que salía el vuelo definitivo, aprovechamos para comer con tranquilidad, echar unas partidas a las cartas, aventurarnos a que pasaría y despedirnos de familiares y amigos.
No sin antes, acordarnos de comprar Fortasec y tener que salir y entrar en la Terminal para localizar la farmacia y volver a pasar todos los controles, a falta de pocos minutos para que se abriese la puerta de embarque rumbo a Punta Cana. Al fin, a las 16:00 se abrió la puerta para entrar en el avión...

Enseñamos pasaportes y papeles de embarque y nos adentramos hacia el tunel de acceso. Localizamos nuestros asientos y nos distribuimos. Dos en lado derecho y el otro en el pasillo central. Los asientos bastante pequeños para mi, incómodos ya que no podia estirar las piernas y tocaba el asiento de adelante con las rodillas. Se avecina viaje largo y pesado.
Arrancan los motores y despegamos. Se nota que es un avion mas grande, mas potente y que va a ir mas lejos. El despegue impresiona un poco. Mas largo que en los vuelos anteriores. Por fin el avion gana estabilidad horizontal y se calma el ambiente. Empieza la tortura. El intentar hacer que pase todo rapido pero parecer que todo pasa mas lento que nunca. Se nota que no estoy acostumbrado a estos viajes. Incomodidad por no poder dormir, por no poder estirar las piernas, moverme, ... y ver como los demas si pueden.

Pasan las horas y todo igual. Ni intentando ver la película que daban ni intentando cerrar lso ojos. No habia manera. Lo tenia asumido, sería un viaje tortura hasta que no llegasemos.


A 45min aprox. De aterrizar, el avión empezó a descender. Ahí fue el peor momento. Al cansancio fisico y mental de todo el viaje, se empezó a sumar un dolor fortisimo en los oidos conforme ibamos perdiendo altura. Algo normal y de lo que me avisaron, pero fue horrible. El dolor no desapareció hasta aterrizar del todo. Momento en el cual el comandante nos dio la bienvenida a Punta Cana y donde nos recibia un ambiente de 27º a las 22:00h! Con esa alegria contagiada de los viajantes tomamos tierra y al fin pisamos tierra firme.

Nos dirijimos a las cabañas al aeropuerto de Punta Cana. Donde te ambientaban con musica ritmosa y sabrosona, para recordarte donde estabas.
Tras rellenar los papeles de entrada al pais y pagar el peaje de 10$ , llegó el momento de recoger las maletas. Siempre está la preocupación de que se haya perdido, robado, abierto, ... que desaparece cuando ves aparecer las 3 maletas nuestras. Bien!
Otra cosa que te das cuenta que estas en otro sitio, es que enseguida se ofrecen a llevarte las maletas sin tu pedirlo. Aunque luego te piden propina, resuelta con 1$ por maleta.

Ya estamos alli! Nos reunen por agencia y nos espera un bus. Nuestro tour operador se nota que es autentico. Mulato, chisposo y ligón de buenas a primera. Tras una breve presentación, nos invita a subir al bus y nos emplaza al día siguiente a una reunión donde nos explicaría todo en detalle de la estancia y viaje .
Arranca el bus. Con la música dominicana a todo volumen. Va dando una ruta por los diferentes complejos turísticos, y bajándose en cada parada varias personas. Es oscuro y poco se ve del camino y alrededores a través del cristal. Al fin anuncian nuestra agencia y vemos el rótulo de Gran Palladium. El bus se aproxima a una recepción enorme. Se detiene. Bajamos de él y buscamos nuestras maletas. Ahora sí, ¡ya hemos llegado!



Haciendo la maleta

Llegó el momento de empezar a preparar el equipaje. Y el momento en que empiezan las dudas de que me llevo? Cuantas prendas de esto? Y cuantas de la otra? Y si voy aquí, me llevo esto? Y si hago esto otro, mejor esta ropa? Hará frio?
Dias antes vas pensando en el viaje y dosificando la ropa para tener todo lo necesario limpio el dia antes del viaje. Ese dia te encuentras todo el mogollon de ropa en un monton, la cual se someterá a un ligero casting antes de ser metido en la maleta.
Maleta grande para facturar y otra para llevar en mano. Que difícil es seleccionar lo justo y necesario. Siempre tiendes a echar mas cosas de las necesarias “por si las moscas...” 

Esos “por si las moscas”, hizo que los integrantes del viaje tuvieramos la broma de que maleta pesaba mas, y si alguno tendría penalización o tuviese problemas para embarcar el equipaje.
Al final acabé llenando la maleta a tope, teniendo que forzar un poco para que cerrara del todo.
Tambien llevaba una mochila como equipaje de mano, con una muda completa y las cosas de uso frecuente durante el viaje (documentación, gafas, movil, música, ...).
Cierro todas las maletas por penúltima vez, hecho el candado a la maleta grande ... y ¡maletas hechas!

Nos vamos a punta cana

Finales del 2011, varios compañeros de trabajo con muy buena relación, empezamos a plantearnos hacer un viaje bien lejos.
Influidos por dos compañeros más que estuvieron en Punta Cana y Riviera Maya, nos recomiendan el Caribe sin duda. 
Sin destino concreto fijado, empezamos a hacernos la idea y empezar a mirar webs de agencias para ver ofertas y empezar a tantear el viaje. Muchas webs, precios y ofertas llamativas; empezamos a buscar algo "BBB" (bueno, bonito, barato) como puede ser un 2x1. La cosa se complicaba, ya que todos los chollos buenos salían desde Madrid, y siendo nosotros de Barcelona, se antojaba misión casi imposible el encontrar algo decente partiendo desde la ciudad condal. 

Acudimos a la agencia Halcon Viajes, con la que colabora la empresa donde trabajamos. Nos recomendaron una comercial en concreto y con ella empezamos a dislumbrar ofertas concretas e interesantes. 
El catálogo de hoteles y complejos turísticos de la isla entra rápidamente por la vista. Construcciones enormes pensadas para el disfrute y la comodidad, la atención al turista, el lujo, etc. Así como entornos casi salvajes, playas paradisiacas, etc hacen que enamores del sitio, sin saber aun si vas a poder ir.
El viaje estaba planeado como en casi todas las ofertas de las agencias, con duración de 9 días y 7 noches. Empezamos a hacer números y rápidamente nos centramos por precio en 3 alternativas. Hotel Be Live 4 estrellas, con todo incluido (como suele ser habitual en el Caribe) por 800€ / persona o dos hoteles 5 estrellas “superior” por 880€ / persona. Lógicamente, valía la pena pagar la diferencia de 80€ ya que los complejos de 5 ***** sup. eran muy superiores – valga la redundancia – al de 4 **** tanto en instalaciones, servicios, comida, actividades ... 

Los 2 hoteles candidatos eran el Hotel Grand Palladium Playa Bávaro y el Bávaro Princess All Suites Resort, Spa & Casino. Haciendo una comparativa eran bastante parejos, pero el Grand Palladium era un complejo de más hoteles unidos, siendo más grande y con más servicios en general, y al final nos decidimos por esa opción.
Ya solo faltaba dar el "ok" a la agencia y formalizar el viaje.
¡Empieza  la cuenta atrás!